Pedro Sánchez barajó el nombre de la profesora canaria de origen gallego como ministra de Sanidad para su primer gobierno

“La solución de los problemas de la Humanidad no es cuestión sólo de números”

“Cuando una mujer es libre interiormente, no permite que nadie la discrimine”

Amado Moreno

Beatriz González López-Valcárcel, doctora en Economía, profesora de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, departamento de Métodos Cuantitativos en Economía y Gestión, vuelve a estar en el candelero de la actualidad. Es una de los veinte prestigiosos expertos españoles en Salud Pública que firman un documento en la publicación “The Lancet” demandando una evaluación externa de la respuesta ofrecida a la crisis sanitaria por el coronavirus para evitar la repetición de errores en la gestión ante el peligro de un rebrote de la pandemia más fuerte en los meses próximos.

Se da la circunstancia de que la profesora canaria de origen gallego formó parte del comité de sabios que asesoró durante la epidemia al Gobierno regional presidido por Ángel Víctor Torres. La gestión aceptable de la crisis colocó a Canarias entre los territorios de España con menos incidencia del coronavirus durante el periodo de confinamiento y posteriormente.

Beatriz González López-Valcárcel ha elaborado estudios de la regulación y el alcance de la intervención pública sobre los recursos humanos en sanidad, especialmente sobre los profesionales. Con anterioridad ejerció la docencia en la universidad de Barcelona y fue invitada de la universidad de Rotterdam.

Su interesante currículum profesional no le pasó inadvertido a Pedro Sánchez, recién investido presidente del Gobierno. Barajó su nombre para el Ministerio de Sanidad,  responsabilidad que finalmente entregó a Carmen Montón en junio de 2018, pocos meses después sustituida por María Luisa Carcedo.

Círculos del PSOE canario aseguran que Sánchez no llegó a formalizar la propuesta tras conocer por terceros la negativa rotunda de Beatriz González López-Valcárcel a aceptar cargos de orientación política o partidista. Prioriza su vocación por la docencia y la investigación como ha demostrado durante más de tres décadas en Canarias.

Nadie duda de que su pensamiento es progresista y de izquierda, pero alejada de sectarismos dogmáticos. El 17 de diciembre de 2008 LA PROVINCIA-Diario de Las Palmas publicó unas reflexiones en el contexto de un perfil humano y profesional de su trayectoria.

“La solución de los problemas de la Humanidad no es cuestión sólo de números, sino también de voluntad”, afirmaba entonces. Sostenía que “el ser humano sin espíritu, sin alma, no sería nada”, cuestionando que el progreso del mundo se vincule exclusivamente a la ciencia y a la economía. “El progreso depende igualmente del alma de las personas y de los pueblos, de sus culturas, de su forma de organización, de su convivencia pacífica –puntualizaba-. La cultura y la tecnología tienen una importante influencia en ese avance necesario”.

En cuanto a la igualdad de género y por lo que respecta al posicionamiento femenino opina que “cuando una mujer es libre interiormente, no permite que nadie la discrimine. No se deja”.

Aunque natural de Vigo, se siente tan canaria como gallega. No en vano lleva varias décadas afincada en Las Palmas de Gran Canaria, lo que le permite valorar algunos problemas: “Canarias debe reflexionar sobre el riesgo que impone su depredación urbanística”, advierte.

Entre los recuerdos satisfactorios a la hora de hacer balance cita su colaboración con Jerónimo Saavedra, ex presidente del Gobierno canario y ex ministro de Educación, para poner en marcha el cuarto curso de la Facultad de Económicas y Empresariales de la ULPGC.